
Lo que más echo de menos es la "situación privilegiada" de mi anfitriona, y me molesta no haberla aprovechado mejor. Y es que dudo que tenga muchas ocasiones de yacer bajo el sol a la altura de un undécimo, refrescándome de cuando en cuando en la piscina, con música estilo "chiringuito" en la radio cutre del bar, enmarcado todo por una impresionante panorámica de la Capital coronada por las torres Kio. Y sin insectos.
Tengo que empezar a jugar a la lotería inmediatamente.
1 comentario:
Efectivamente. Jugar a la lotería (y ganar, of course) es la mejor forma de vivir (y disfrutar) Madrid.
Eso sí, no podemos quejarnos de este verano en el que ni una noche he tenido que dormir con el aire acondicionado encendido.
Enjoy the weather.
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